Me
desperté en la mañana
esperando en ese día
que la pasión seguiría
aunque tú estabas lejana.
Fue allí que de buena gana
me confesaste una cosa
que era triste y escabrosa
mostrando arrepentimiento,
esperando en ese día
que la pasión seguiría
aunque tú estabas lejana.
Fue allí que de buena gana
me confesaste una cosa
que era triste y escabrosa
mostrando arrepentimiento,
y
en ese mismo momento
dejaste de ser mi diosa.
dejaste de ser mi diosa.
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