Amanecer nublado de otoño

Llegó más temprano que de costumbre al parque en ese amanecer de otoño, porque estaba completamente nublado y quería cumplir con éxito las tareas programadas, dado que para eso se había entrenado. Estaba convencido que lograría eliminar del suelo en tiempo y forma, la enorme cantidad de hojas secas caídas de los árboles, antes que se desatara la lluvia.

Seleccionado IV Concurso de Microrrelatos. Escritores del alba.

Publicado en el libro Escritores al Alba IV.

Diversidas Literaria. España. Abril 2020.

La primavera la sangre altera

Cuando los alumnos estaban por subir muy contentos al autobús para realizar la excursión escolar, el conductor al ver la alegría de los niños, le dijo graciosamente a la maestra el dicho "la primavera la sangre altera", y al escucharlo, ésta asintió con la cabeza con una sonrisa forzada. Es que ella estaba bastante preocupada porque en esa mañana primaveral había hecho el amor sin tomar precauciones.

 

Seleccionado VI Concurso de Microrrelatos.

Publicado en el libro La primavera la sangre altera.

Diversidad Literaria. España. Abril 2020.

Hacia mi destino

Para llegar al destino
de un extenso caminar,
obstáculos muy diversos
yo tengo que sortear.

Busco en los itinerarios
que las sendas sean bellas,
y en las noches se iluminen
con la luna y las estrellas.

Pero en esas largas sendas
al girar la vista atrás,
dejo mi rastro en la tierra
que no vuelvo a ver jamás.

Por eso, para alcanzar
el destino de mi andar,
la mirada hacia el futuro
siempre me ha de acompañar.

Finalista V Concurso de Poesías. Surcando el viento. 
Publicado en el libro A veces.
Tu Concurso Literario. España. Abril 2020.

Quiero decirte adiós

Quiero decirte adiós

para toda la vida,

aunque algo de mi vida

muera dentro de mí.

Quiero decirte adiós,

para toda la vida,

aunque toda la vida

siga pensando en ti.

 

Finalista V Concurso de Micropoesías. Recordando aprendí.

Publicado en el libro A veces. 
Concurso Literario en Español . España. Abril 2020.

Oportunidades perdidas

Ella lo ha dejado y ahora en medio de la soledad, está con el corazón helado, luego de haber simulado durante meses un formal e inocente romanticismo, mientras esperaba formalizar la relación para hacer el amor. Y fue en una noche apasionada, que por estar indeciso, dejó pasar varias veces el tren de las oportunidades perdidas, con sus vagones cargados de cálidos placeres.
Aquellos momentos son ya irrecuperables y solo le queda desplegar un manto de olvido, para poder cubrir ese frío recuerdo.

Finalista V Concurso de Micronarrativas. Recordando aprendí.
Publicado en el libro A veces.
Concurso Literario en Español. España. Abril 2020.

Los dos delfines

Él y yo navegábamos proa al norte con la vela mayor. A nuestro alrededor, solo había agua, nubes y un delfín que dibujaba su lomo cuando se acercaba a curiosear. Nos venía siguiendo, asomando la nariz por popa y zambulléndose hacia babor. El delfín iba y venía, dibujando figuras incesantes a nuestro alrededor.
Él se inclinaba y le hablaba. Se entendía bien con el delfín. Se inclinaba sobre la baranda hasta que su cabeza quedaba a corta distancia. Pero no le estaba hablando de mí y me alarmó escuchar el nombre de otra mujer. Debo confesar que yo sabía antes de zarpar que mis días estaban contados. Que para él yo era una aventura fugaz y nada más.
Y él ahora le estaba contando al delfín que cuando llegáramos al muelle lo esperaba un encuentro amoroso con una joven mujer. El delfín se iba alejando despacio y él se inclinaba cada vez más. Colgado de la baranda quería asirlo, pero el delfín se le escapaba, jugando con él, pero sin dejarse atrapar.
Y fue en ese momento que decidí que él era mio y que esa de quien hablaba nunca lo podría tener. Lo empujé y el delfín se alejó espantado cuando él cayó bruscamente en el mar. Pasados unos minutos, la espuma del chapuzón se apagó y ni él, ni ningún lomo volvieron a aparecer sobre la superficie del mar. 
Entonces, tomé el timón, sabiendo que mi vida no sería la misma desde que él ya no iba a estar. Ahora, algunos dicen que en noches de luna llena se ven a dos delfines navegando en el lugar.

Finalista V Concurso de Cuentos Breves. Surcando el viento.
Publicado en el libro Saber estar.
Tu Concurso Literario. España. Abril 2020.

Mujer arrogante

Eres mujer arrogante

dominante y atractiva,

tan vanidosa y altiva

que haces que nadie te aguante.

Te crees muy importante

dominando a todo el mundo,

y ante un fracaso rotundo

nunca aceptas los errores,

ni muestras tus sinsabores,

aunque te marquen profundo.

Mención del Jurado VI Concurso de Décimas. 

Homenaje a las mujeres.
Publicado en el libro Compromiso.

Mundo Escritura. España. Abril 2020.

Vino a verme

ꟷ Sabía que tarde o temprano ibas a venir a verme ꟷ, le dije muy emocionado al verla tan hermosa después de enterarme del accidente.

Ella me iba a responder, cuando de pronto escuché la voz del mozo.

ꟷ Disculpe que lo despierte señor, ¿le podría cobrar porque ya es la madrugada y tenemos que cerrar el bar?

Le pagué la cuenta aún perturbado y al levantarme de la silla el mozo me indicó que me estaba olvidando algo. Sobre la mesa relucía el anillo que yo le había regalado antes de separarnos.

 

Finalista V Concurso de Microrrelatos. 

La mujer mueve al mundo.

Publicado en el libro Ellas.
El Muro del Escritor. España. Abril 2020.

El velero rosa

Una ola de mar me surge ardorosa

sentado sobre una roca inmutable,

mas la espuma se dispersa amigable

y a mis pies los humedece amorosa.

A lo lejos veo un velero rosa

en un paisaje de mar admirable,

que subyuga a mi espíritu excitable

emplazado en esta playa rocosa.

Emitiendo un destello reluciente,

el navío seductor y atrevido

se acerca hacia mí presurosamente.

Viene navegando airoso y erguido

eludiendo las olas diestramente,

y a mi ánimo de gozo lo ha sumido.

Finalista IV Certamen de Sonetos. Francisco de Quevedo.

Publicado en el libro Haikus y Sonetos XLV.

Letras como Espada. España. Abril 2020.

El día del parque

El sol radiante
lo despabila al parque
por la mañana.

Se nubla el cielo

y el parque por la tarde
duerme la siesta.

Tras el follaje

el parque por la noche
ama a la luna.

Finalista V Certamen de Haikus. Hawai Chigetzu. 

Publicado en el libro Haikus y Sonetos XLV.

Letras como Espada. España. Abril 2020.

La ternura de tu voz

Al llegar el final de mi vida mi mente va desandando el camino recorrido y vuelvo sentirme un niño ante una mujer extraordinaria. Gracias mamá por haberme cuidado y educado. Gracias por apoyarme y alentarme, rezando por mí a un Dios en el que yo no creía. Me ayudaste a forjar mi destino de escritor y no alcanzarían mil poemas para agradecerte. Y ahora en el final, como si fuera un milagro, siento que desde el cielo te acercas hacia mí y al alzarme en tus brazos, vuelvo a oír la ternura de tu voz.

Finalista VI Certamen de Microrrelatos. Mujeres extraordinarias.
Publicado en el libro Proclama.
Letras como Espada. España. Abril 2020.