Para el poeta y la poetisa ya había llegado el otoño de sus vidas. Pero en esa cabaña de invierno de aquel valle encantado, en ese ocaso de otoño, el tono amarillo y pardo de los árboles configuraban un paisaje mágico y maravilloso ante sus ojos impregnados de poesía. Y al caer la noche, al hacer el amor bajo la luz de la luna, la poesía había convertido en primavera ese otoño de sus vidas.
Seleccionado VIII Concurso de Microrrelatos. Otoño e invierno.
Incluido en el libro :Otoño e invierno VIII.
Diversidad Literaria. España. Febrero2024.
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