Perro vagabundo de triste destino,
que exhibe la flacura de su existir,
y como si fuera un mendigo canino
busca en una estación lograr subsistir.
El alimento en su escasa porción diaria
son los deshechos tirados desde el tren,
y salta con ansia, gozoso o con rabia,
desde un lado al otro del humilde andén.
Hasta que finalmente llegará el día,
en que sus huesos descansen en la vía.
Finalista X Concurso de Minipoemas. Cosas pequeñas.
Incluido en el libro: Discreto amanecer.
Mundo Escritura. España. Octubre 2024.
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