En esta noche hay tristeza en mis letras de poeta, al ver en la orilla del lago a ese banco solitario iluminado por la luna. Y ahora ese banco que juntos nos vio hacer el amor, me pregunta porqué después de tantos años el olvido no me ha podido curar. Y con mis letras apenadas le respondo que es en vano, porque a pesar del tiempo transcurrido ella sigue viviendo en mi. Y aunque escribiendo poesías mi alma sigue buscándola, mi corazón sabe que ya nunca ha de volver.
Finalista VII Certamen de Microrrelatos. Lluvia de letras.
Incluido en el libro: Atrapasueños.
Letras como Espada. España. Mayo 2021.
Hay amores con marcas de fuego
ResponderEliminar